El tutorial de maquillaje del perfecto rockero: Gene Simmons te enseña a parecer miembro de KISS
Escrito por Admin2 el septiembre 3, 2020
Kiss es una de las bandas de rock más reconocibles en todo el mundo, y no sólo por su música, sino también por su aspecto. Ya desde su primera actuación, que data de 1973, su imagen se caracterizaba por lo rudo de su aspecto, cercano al glam, pero con trajes estrafalarios y, sobre todo, por su maquillaje en blanco y negro.
Según han contado en alguna ocasión, cada uno de ellos se inspiró en sus propios gustos para pintarse la cara, con su propia identidadbien diferenciada y sus personalidades. Uno de los líderes, el bajista Gene Simmons, por ejemplo, se hace llamar demonio a causa de su interés por la teología y otras religiones. De ahí que su maquillaje esté inspirado en Drácula, con unas alas de murciélago que evocan al género de terror.
Por su parte, Paul Stanley, el otro miembro fundador de la banda y voz y guitarra, tiene una caracterización mucho más alegre y cercana con el público. Y una inconfundible estrella en el ojo derecho. Tommy Thayer asume el rol de hombre del espacio con su maquillaje estuviera inspirado en la astronomía y los ovnis. Por último, el batería Eric Singer luce en las actuaciones como si fuera un gato, a partir del mito de las siete vidas de los felinos.
Hace unos seis años, la revista Cosmopolitan invitó a Gene Simmons y a su hija Shopie para participar en un tutorial de maquillaje en el que pudieramos ver de primera mano cómo se maquilla una estrella del rock. Así que, pincel y pintura en mano, se lanza a la faena con su hija como modelo: “Si quiere un verdadero aspecto Kiss, debes comenzar con pintura blanca de payaso”, empieza Simmons, agregando que se puede encontrar en cualquier tienda de Halloween.
Después de esa buena capa de base blanca, marca el perfil de la cara y comienza a realizar el dibujo con un delineador negro. En este caso, recordemos, se trata del diseño del demonio, que comienza trazando con unos puntos y luego los une para formar el dibujo. Finalmente, con un pincel y pintura negra, le pone una especie de antifaz de demonio y concluye con los labios negros.
El resultado es increíble y la ejecución no puede ser más sencilla. Una idea más para nuestra próxima fiesta de Halloween.