Las 6 mejores canciones de Queens of the Stone Age
Escrito por AbelitoMusic el agosto 25, 2017
Por fin, esta semana sale Villains (Matador, 2017), el nuevo trabajo de la veterana banda californiana Queens of the Stone Age. Por supuesto, pronto saldrá en nuestra web un análisis concreto del séptimo trabajo del grupo, pero para ir abriendo boca vamos a realizar un rápido top con sus mejores canciones.
My God Is the Sun (…Like Clockwork, 2013)
Make It wit Chu (Era Vulgaris, 2007)
De entre las lentas de “las reinas”, ‘Make It wit Chu’ siempre tuvo un magnetismo especial. Un fuego lento con mucha fuerza sexual, un estribillo de mucho gancho y casi cinco minutos de baile lento e irresistible. Uno de los highlights de su disco menos lucido.
How to Handle a Rope (Queens of the Stone Age, 1998)
Una de esas pequeñas joyas que toca rescatar de su álbum debut. Es cierto que las más memorables del primer disco están casi todas al inicio, pero esta pieza situada justo en el ecuador del mismo sigue funcionando de maravilla y es la mejor muestra de lo qué buscaba Josh Homme para distanciarse de Kyuss.
Monsters in the Parasol (Rated R, 2000)
Siempre he tenido una relación muy extraña con esta canción, sobre todo con su estribillo, que me sigue rompiendo la cadera cada vez que suena. No obstante, no deja de ser otro de los juegos particulares de QOTSA que los hacían un mundo aparte dentro del meinstrim rockero y la verdad es que esas estrofas ya conquistan sin necesidad de encender los fuegos artificiales.
If I Had a Tail (…Like Clockwork, 2013)
QOTSA son una banda muy bailable dentro de sus propios parámetros y eso es gracia a cosas como las que muestran en ‘If I Had a Tail’: guitarras con mucho flow, un ritmo enérgico muy marcado y el dominio como frontman de Homme. Siempre me pareció una de las más especiales de …Like Clockwork.
A Song for the Dead (Songs for the Deaf, 2002)
No es complicado coincidir en calificar a Songs for the Deaf como el disco de mayor equilibrio de su discografía. Mantiene el stoner árido y pasado de rosca de sus predecesores y marca el tono rockero y alternativo de lo que vendría después. Como muestra, esta pieza con la inestimable y desgarrada aportación de Mark Lanegan. Sus guitarras siguen siendo crema.