Pero el estudio va más allá, y es se estima que hasta verano de 2019 Apple venderá unos 130 millones de iPhone X. Por su parte, Samsung podría vender unos 50 millones de Galaxy S8 con unos 202 dólares de beneficios de cada teléfono. Si multiplicamos las cifras, Samsung podría generar unos 4 mil millones de dólares más de fabricar el iPhone X que de fabricar el Samsung Galaxy S8.
La relación entre Samsung y Apple siempre ha tenido sus altibajos. Pero es que a pesar de que en 2011 Apple demandó a Samsung por infracción de patentes, llevan colaborando juntos desde la creación de los iPod, cuando Samsung suministraba las memorias flash del reproductor de música.
Poco a poco Apple ha tratado de no depender tanto de una sola empresa como Samsung sino de diversificar mejor a sus proveedores. el panel OLED del iPhone X está fabricado íntegramente por Samsung por ejemplo, de ahí que sea tan caro. Apple está ayudando sin embargo a otros proveedores como Sharp o Japan Display para fomentar la producción y no ofrecerle a Samsung toda la demanda. Para el smartphone estrella de Apple, Samsung tiene dos componentes cruciales dentro de él; la pantalla y la memoria, por lo que según información del The Wall Street Journal, la compañía coreana ganará alrededor de $110 dólares ($2,000 MXN aproximadamente) por cada iPhone X que Apple venda.