El cine español está de luto por la muerte de Verónica Echegui, una de sus intérpretes más singulares y queridas. La actriz falleció este domingo en Madrid a los 42 años, víctima de un cáncer que enfrentó en silencio.
Su partida causó conmoción en la industria, dejando un vacío profundo entre colegas, admiradores y críticos que la reconocían como un talento único y una mujer auténtica.
Instituciones como la Academia de Cine de España, el Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA) y el Festival de San Sebastián expresaron su pesar por la noticia. “Profunda tristeza ante el fallecimiento de Verónica Echegui, actriz de enorme talento por quien sentimos gran cariño y admiración”, publicó el certamen donostiarra.
Incluso el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, envió un mensaje de condolencia destacando su legado.
Los homenajes subrayan la capacidad de Echegui para conquistar al público desde su debut en Yo soy la Juani (2006), dirigida por Bigas Luna, con la que obtuvo una nominación al Goya a actriz revelación. Desde entonces, construyó una carrera versátil que abarcó dramas sociales, comedias románticas, musicales y series internacionales.
A lo largo de su trayectoria fue nominada en cuatro ocasiones al Goya, hasta que en 2022 obtuvo la estatuilla como directora por su cortometraje Tótem loba, una obra íntima y comprometida que reveló otra faceta de su sensibilidad artística.
En televisión dejó huella en títulos como Fortitude, Apaches, Trust, Intimidad y la reciente A muerte. Su última película, Hortelana, aún pendiente de estreno, será su legado póstumo en la gran pantalla.