El ministro de exteriores ruso Serguéi Lavrov (der) saluda al ministro interino de relaciones exteriores del Talibán afgano Amir Khan Muttaqi, en Moscú, el 4 de octubre del 2024. Foto/fuente AP
Rusia se convirtió este jueves en el primer país en otorgar reconocimiento oficial al gobierno talibán en Afganistán, un paso que marca un giro significativo en la política internacional desde la llegada de los talibanes al poder en 2021. La decisión llega después de que Moscú eliminara al grupo de su lista de organizaciones prohibidas.
El Ministerio de Relaciones Exteriores ruso anunció que aceptó las credenciales del nuevo embajador afgano en Moscú, Gul Hassan Hassan, lo que representa un reconocimiento formal al régimen talibán. Según la cancillería, este acto busca abrir el camino hacia “una cooperación bilateral productiva”.
Desde Kabul, el Ministerio de Relaciones Exteriores afgano celebró el reconocimiento como un "paso histórico". El canciller talibán, Amir Khan Muttaqi, describió la decisión rusa como “un buen ejemplo para otros países” que aún no han dado el mismo paso.
Tras la retirada de las tropas estadounidenses y de la OTAN en agosto de 2021, los talibanes retomaron el control del país y han luchado por obtener legitimidad internacional. A pesar de no haber sido reconocidos oficialmente por ningún Estado hasta ahora, han mantenido contactos diplomáticos y negociaciones con potencias como China, Irán y los Emiratos Árabes Unidos.
No obstante, el gobierno talibán continúa enfrentando un fuerte aislamiento global, principalmente por sus severas restricciones a los derechos de las mujeres. Aunque prometieron un enfoque más moderado respecto a su primer régimen (1996-2001), poco después de asumir el poder volvieron a imponer duras medidas: las niñas tienen prohibido estudiar más allá del sexto grado y las mujeres no pueden trabajar ni acceder a espacios públicos como parques, gimnasios o baños públicos.
Pese a ello, Moscú ha señalado la importancia de mantener canales de diálogo con los talibanes para contribuir a la estabilidad de Afganistán. En abril, Rusia eliminó oficialmente al grupo de su lista de organizaciones extremistas, lo que allanó el camino para el reconocimiento.
El embajador ruso en Kabul, Dmitry Zhirnov, explicó en declaraciones a la televisión estatal que la decisión fue adoptada por el presidente Vladímir Putin, tras consultar con el canciller Serguéi Lavrov. Zhirnov aseguró que esta acción refleja “el sincero deseo de Rusia de establecer relaciones plenas con Afganistán”.